El sistema auditivo no es capaz de diferenciar dos sonidos al interior de una banda crítica. Basta con que exista algo de energía al interior de una banda crítica para que ésta se active y el sistema auditivo perciba actividad en esa banda. Si existe más de un sonido o se incrementa la energía al interior del filtro, esto no cambia la información desde el punto de vista del sistema auditivo. Entonces, si un sonido se encuentra al interior de una banda crítica de otro sonido y si su amplitud no es lo suficientemente grande como para traspasar el umbral de dicha banda y activar otra banda crítica cercana, se produce el fenómeno denominado enmascaramiento. La codificación perceptual de audio, detallada en la sección 3.8, se basa fuertemente en éste fenómeno para reducir la cantidad de información necesaria para almacenar y reproducir una señal sonora.
Las bandas críticas pueden medirse en función del enmascaramiento que producen de acuerdo al procedimiento descrito en la figura 3.11. El ancho de banda de una máscara constituída por ruido blanco se ensancha contínuamente y se mide el nivel de enmascaramiento que produce respecto a una señal de prueba. Una vez que se alcanza el punto sobre el cual el enmascaramiento no cambia significativamente al agrandarse el ancho de banda, se está en la presencia de los límites de la banda crítica en medición.